Chünte'
Wiñik
En un momento
de distracción
en un hermoso
atardecer,
con un extraño
mensajero
rencontróse el
peregrino y la flor.
Sintieron una
suave vibración,
el mundo se
sintió estremecer
por aquella
desbordante emoción
que en un
rencuentro suele acontecer.
Renació una
inmensa devoción…
se sintió el
peregrino desfallecer
por una
inevitable veneración
que en cada
instante se sentía acrecer.
Fue un momento
de conmoción
las aves
elevaron su cantar
alegrando al
mundo en su extensión
el cielo, las
montañas, valles y la mar.
Fin