Dédalo
de la Fuente
Después de la visita de Enrique Peña Nieto a la Universidad
Iberoamericana donde fue abucheado por decenas de jóvenes, saltaron a la
defensa del candidato presidencial algunas personalidades políticas cuyas
declaraciones generaron inconformidad entre los estudiantes de la IBERO. Dichos
personajes tacharon a los estudiantes de acarreados y como todo mundo sabe, la
respuesta de los estudiantes fue subir 131 vídeos a YouTube mostrando sus
matriculas y así demostrar que eran auténticos estudiantes de dicha
institución. Días después se sumaron mas instituciones (en su mayoría de nivel
superior) declarando: "Yo soy el 132".
No es de mi
interés tratar el origen a profundidad de este movimiento, puesto que algunos
escritores y algunas plumas a sueldo ya se ocuparon de ello. Sin embargo es
necesario analizar las demandas enarboladas por este movimiento ya que las
circunstancias actuales así lo exigen.
Tras varias
convocatorias por la internet (medio que ha servido en los últimos tiempos como
herramienta fundamental para convocar a marchas multitudinarias, no sólo en el medio Oriente si no en todo el globo) salieron a la calle
el miércoles 23 de mayo cientos de jóvenes que se dieron cita en la estela de
luz, “monumento a la corrupción (declaraciones de los integrantes del
movimiento) y a la opacidad erigido por el gobierno de Felipe Calderón”. Pero
no todo quedó en marchas; recientemente se congregaron en las islas de la UNAM
donde realizaron su primera asamblea con la participación de 54 escuelas públicas
y privadas. En dicha asamblea hicieron públicas sus demandas y el camino a
seguir de dicho movimiento.
Estela de luz:
En la primera conglomeración del movimiento "#YoSoy132" los
estudiantes expusieron ante la sociedad civil, los puntos por los cuales se
había conformado el movimiento: Queremos que la situación actual de miseria,
desigualdad, pobreza y violencia sea resuelta. #YoSoy132 no representa a
ninguna institución pública o privada. En esencia lo que exigimos es la democratización de los medios de
comunicación, con el fin de garantizar información transparente, plural e
imparcial para fomentar una conciencia y pensamiento crítico (palabras tomadas
del discurso político).
Islas de la
UNAM: Aproximadamente 5,000 jóvenes convocó el movimiento de universitarios en
las islas de la UNAM. Se revisó el Futuro
del movimiento y se realizaron 15 mesas de trabajo donde el renovado movimiento
propuso que #YoSoy132 se pronunciara como un movimiento anti-neoliberal y
contra Peña Nieto. Se proclamaron en contra de aquello que pretenda restaurar
un antiguo régimen de prácticas autoritarias. Someter a Elba Esther Gordillo a
juicio para que la educación avance. Por último plantearon se creara una reforma constitucional para revocar
el mandato y a no caer en provocaciones ni violencia. (¿?)
Estos dos
grandes acontecimientos marcaron el rumbo del movimiento, y lo que parecía un
movimiento espontáneo surgido de la inconformidad de decenas de estudiantes
apartidistas y con ánimo de transformar a la sociedad, resultó ser un movimiento electorero dirigido (una vez más) por la más alta
cúpula de la supuesta “izquierda” de nuestro país.
Las
contradicciones del movimiento han generado polémica entre la sociedad, pues se
deja al descubierto los intereses de quienes dirigen el movimiento. ¡Democratización
de los medios de comunicación! ¿Acaso no es Carlos Slim quien desde hace varios
años lucha para que se le otorgue la concesión de televisión por cable? ¿No es
Slim quien en los últimos días apoya la campaña de AMLO? ¡Anti-Peña Nieto! ¿Qué
hacen miembros de la izquierda (José Ramón López Beltrán, Alejandro Encinas,
Epigmenio Ibarra, Cristina Sada) en un movimiento estudiantil apartidista?
Existen 80 millones de pobres en México ¿por qué no lucharon para erradicar la
pobreza en nuestro país desde que se dieron las cifras oficiales hace ya varios
años? De todos los miembros de la OCDE, México ocupa el penúltimo lugar en
materia de educación ¿Por qué no se generó un movimiento que luchara por una mejor educación más crítica, científica y popular?
“El elemento
espontáneo no es sino la forma embrionaria de lo consciente” (Lenin ¿Que
hacer?). El estudiantado mexicano al igual que las huelgas obreras de 1890 en
Rusia, ha empezado a inconformarse pero no ha logrado comprender la necesidad
de construir un movimiento auténtico que
transforme a la sociedad. Se les ha olvidado que no es el estudiantado quien
realice los cambios en la sociedad. Por eso cuando exigen un cambio en la
sociedad con sólo democratizar los
medios de comunicación, caen en un abismo, no logrando entender que los medios
de comunicación siempre estarán a favor de la clase que ostenta el poder. Por
lo tanto, la primera demanda del movimiento estudiantil debe ser erradicar los
males de la educción en nuestro país, mejorar los centros educativos, becar a
los que realmente lo necesiten y elevar
la educación en nuestro país.
La necesidad exige
un movimiento vigoroso, auténtico, que
aglutine a todos los sectores de la clase menesterosa, y es aquí donde el
estudiantado por su condición de sabedor y generador constante de ideas, está obligado a llevar la ciencia del proletariado a todos los
proletarios. De no tomar en cuenta esto, estaremos repitiendo una vez mas las
viejas lecciones que la historia se ha encargado de crear para nosotros y que
por mucho tiempo las hemos eludido, esas lecciones son nada más y nada menos
que la revisión de los fracasos y aciertos de la sociedad en su conjunto. La
realidad es exacta y nos dice a gritos que el movimiento #YoSoy132 debe
expulsar a sus falsos guías y generar a sus propios líderes; deben dejar de ser
un movimiento electorero y en consecuencia, deben ponerse al frente de los mas
necesitados. De no ser así (y lo peor de todo es que por este camino andan) sólo estarán jugando a los inconformes por un simple copete aun y
cuando el movimiento tenga a uno que otro verdadero líder social.