29 mar 2012

Arrancan las campañas por el poder



Por Ricardo Flores Ríoblanco

Con bombo y platillo, los diferentes medios de comunicación celebran el arranque de las campañas presidenciales y pregonan el “ejercicio democrático” que el pueblo emprende “libremente” cada seis años. Pero lo cierto es que dichas campañas iniciaron desde hace tiempo, perfilando a los mejores candidatos que el sistema económico y político necesita para seguir existiendo, dejando a un lado las necesidades y las opiniones del pobre.


El pueblo mexicano es, desgraciadamente, uno de los menos politizados en América Latina, sabiendo esa realidad, los medios de comunicación no se tardan en incidir en las mentes de los electores, manipulando sus preferencias y callando su descontento. Sí,  la ignorancia ciega al humano, pero no por ello no le permite anhelar y hasta luchar por lo que cree justo y correcto, es decir, la realidad provoca en algún punto, descontento y deseos de cambio hasta en el más silvestre de nuestros hermanos.

Hasta ahora, no he escuchado a ninguno de los candidatos ofrecer cambiar la realidad en la habitan más de 80 millones de mexicanos, la pobreza en particular. Vemos intentos tímidos de conciliar con el pueblo, escuchamos una refrenda a la política de violencia, y hasta sociedades “amorosas”, pero nada de propuestas concretas para aliviar la miseria.

La inmensa mayoría de los pobres, serán victimas de la manipulación por parte de los medios, de las mentiras-promesas por parte de los candidatos,  de las sucias campañas de descalificaciones, todo como parte de una guerra en la que se discutirán la silla presidencial para desde allí, ejercer el poder sin mirar atrás.

El tiempo de los partidos políticos más influyentes en México, se acaba. Si bien el poder que los medios de información tienen sobre la población es inmenso, las “maquinas de sueños” no podrán sofocar el fuego que se expande gracias a las contradicciones de un sistema que sustenta al hombre más rico del mundo, y al mismo tiempo sume  a más de la mitad de su población en la miseria.


Las elecciones venideras serán las más reñidas entre las elites que desean conservar el poder, y las que buscan hacerse de él; mientras que para el pueblo, la única vía posible de cambio en paz, queda sesgada  a un cambio de personas y formas de como se ejerce el poder, pero no un cambio de fondo para mejorar su dura realidad, la cual, con cada día que pasa, se vuelve insoportable.


Parece que los partidos quieren  hacerse del poder, por el poder, lo que pondrá en juego la estabilidad de una nación que de por si pende de un hilo, peor será si quienes ya tienen el gobierno, emprenden caminos maquiavélicos para quedarse con él; las campañas electorales, a punto de arrancar, buscarán de todo, menos hacer un compromiso de cambio de las condiciones  de  las mayorías.  



El doble discurso y la falta de soluciones.


Liseo González


El tema nuclear, sin duda, ha sido siempre un tema muy grave y delicado, y en los tiempos que corren se ha vuelto peligrosamente  el pan de cada día. Un día sí y otro también se celebran reuniones y conferencias internacionales para buscar soluciones, pero nunca se pasa de la demagogia y de los discursos vacíos; cada quien busca sus propios intereses y se dejan de lado los de la mayoría. Y lo único que va quedando de todo esto es el afán de seguir controlando y sometiendo a más pueblos débiles por el mayor tiempo posible.

Por ejemplo, el Presidente de los Estados Unidos, Barack Obama,  en la pasada cumbre de seguridad nuclear celebrada en Seúl, Corea del Sur, declaró que la posibilidad de resolver el conflicto con Irán pacíficamente “aún existe”, pero que “la ventana se está cerrando”. Esto sucedió al tiempo que en los Estados Unidos  se declaraba sobre la creación de la mayor bomba convencional -la revienta-búnkeres de 13,6 toneladas- como ‘grandiosa’ para un ataque militar contra Irán. Y ahora las preguntas se hacen necesarias, ¿Así es como los Estados Unidos busca solucionar el tema nuclear? ¿Crear más bombas  es la solución a tal problema? Claro que no.

En el mismo tono, aunque más grotesco y radical, está Israel; el estado hebreo sigue en su terco intento de atacar Irán, ya que los iraníes, según ellos, están produciendo armas nucleares. Incluso espías israelíes han entrado al país islámico para sustentar estas “quejas”. A esto debemos añadir la eliminación de  eminentes científicos iraníes por parte de Israel y sus aliados de la OTAN, que  dejan cada vez claro sus brutales intenciones.

Irán no posee armas nucleares.

En repetidas ocasiones  Irán ha insistido en que su programa nuclear es con fines pacíficos. Se le acusa de producir uranio enriquecido que sirve como combustible energético o componentes de uso médico. Esta posesión o producción no es equivalente a la producción de armas nucleares. Además, Irán no es el único que utiliza uranio enriquecido, diferentes países lo utilizan como fuente de energía y este no puede emplearse en la confección de un arma nuclear sin un proceso previo y complejo de purificación, pero aun así, sus acusadores insisten.


Por el otro lado, Israel, que con la ayuda y la cooperación de Estados Unidos fabricó armamento nuclear sin informar ni rendir cuentas a nadie y  sin reconocer la posesión de estas armas, de las que dispone de cientos. Se sabe también que para impedir el desarrollo de las investigaciones en países árabes vecinos atacó y destruyó los reactores de Irak y de Siria. Y a su vez, ha declarado abiertamente, su propósito de atacar y destruir los centros de producción de combustible nuclear de Irán.

En este sentido, muchos diplomáticos hacen uso del doble discurso, llenándose la boca repitiendo del peligro y de la necesidad de atacar Irán, pero guardando sepulcral silencio hacia casos como Israel. ¿O es que acaso las armas nucleares que posee Israel no son un peligro?

Ante esta amenaza, los líderes iraníes insisten que de ser atacados se defenderán, como lo haría cualquier otro gobierno en el afán de defender a su pueblo y su territorio.
  
Por último, en estos conflictos los medios de comunicación juegan un papel importante que muchas veces lejos de informar sobre la verdad y el fondo de los problemas, desinforman intencionadamente. Encargándose de crear y condenar a “tiranos” y “déspotas” que gobiernan el mundo, tal es el caso de Irán y Siria, en donde se han descubierto campañas de cadenas de televisión americanas y británicas que utilizando agentes especiales como reporteros juegan un papel de provocadores.

Sin duda, la única solución sesuda a este conflicto es la vía pacífica, de lo contario, gravemente nos lamentaríamos como especie humana una guerra a estas alturas de la historia, no hay más.

22 mar 2012

Contigo




Cayó el último rayo de sol
y tú estabas a mi lado
contemplando ese gran
evento cultural
que ofrecían a la multitud en general

La primera estrella
se posó sobre nosotros
volviste el rostro hacia mi
y me encontré con
tus suaves labios

Era tan exquisito
el sabor de tu boca
que no le pedía nada
al néctar de los dioses

Diego Rivera entre cuatro paredes


Ricardo Flores Ríoblanco

El arte no puede ser cualquier cosa, debe tener por esencia la realidad, lo material.  Lo bello que crea el artista es, precisamente, la forma de reflejar esa realidad, que hace que quienquiera que aprecie una obra, reconozca el reflejo de su entorno, vea y sienta su realidad tal cual es, sea esta bella o repugnante,  expresada con sutileza, belleza y delicadez por el artista.  

Los pueblos de la tierra han sabido utilizar el arte para expresarse, para comunicarse y entenderse; para contar su propia historia y representarla de la manera más sutil y delicada, despertando así la sensibilidad humana.

Los mejores artistas son aquellos que han entendido que el arte proviene y es creado por el pueblo y han representado en sus obras tanto la alegría del pueblo, así como su miseria, sus anhelos más reprimidos y su sufrimiento a través de los siglos.

El arte es también protesta, descontento, denuncia, enojo y rebelión del pueblo, que el artista expone en sus obras y que como efecto, enciende a las mentes más despiertas, y cimbra a las más dormidas. En este sentido, México ha tenido a grandes exponentes del arte de protesta, el cual sin dejar de ser bello, refleja un sufrimiento humano ignorado por los poderosos: la pobreza del pueblo.

Diego Rivera fue un grande que se entregó al pueblo, sus obras contienen escenas de descontento popular que todavía hacen temblar a los poderosos; su vida,  obra y  lucha son testimonios del México  postrevolucionario que cansado de las guerras, la muerte y la opresión, se lanza al siglo confiado del triunfo -arrebatado por la burguesía mexicana naciente-, que logró con su lucha.

Destacado por sus murales que aún se pueden apreciar por diferentes zonas de la ciudad, Rivera logró encontrar el escaparate perfecto para que el pueblo apreciara sus obras, la ciudad misma. Así es como se comunicaba con el pueblo y le recordaba el sacrificio que este hiciese durante y antes de la revolución, sus héroes más destacados, su vasta y hermosa variedad de folklore popular.

También le decía que su realidad había que cambiarla, pues a pesar de haber luchado tanto, seguían siendo reprimidos por los poderosos de siempre, por ello, evocaba tanto las escenas revolucionarias y aquellas de las épocas coloniales, les recordaba que como pueblo, México había estado de rodillas por mucho tiempo, pero que la posibilidad de romper las cadenas y alzarse como gigante contra los tiranos, es tan real como el sol que nos ilumina.

"El levantamiento" 

Recientemente, tuve la oportunidad de observar las obras que Diego Rivera hiciese en Nueva York durante los años 30. Monumentales, hermosas y realmente expresivas de una época llena de sucesos violentos que sacudieron a la humanidad entera. Expresan la capacidad creadora que posee el más humilde de los obreros, a quienes Rivera reconoce como los constructores genuinos de una ciudad tan avanzada como lo sigue siendo Nueva York.


Sin embargo, al experimentar la alegría de estar en frente de una obra única, me percaté que me encontraba aislado, como entre cuatro paredes que no permiten el paso del más leve rayo de sol, sentí como si la protesta de Diego se encontrara encerrada, cautiva, presa.

Y me di cuenta que no éramos tan solo Diego y yo, que el pueblo mexicano está entre cuatro paredes también, que es necesario que el espíritu creador del pueblo se desate para despertarlo del letargo al cual es sometido; que hoy, más que nunca, México necesita artistas comprometidos con el pueblo, sensibles a su dolor, con mente desprejuiciada y ganas de hacer justicia al oprimido y despreciado. Creo que ese es el  gran legado que dejó Rivera en sus obras.                      

14 mar 2012

La crisis política en Siria y la descarada propuesta de intervención.


 Liseo González

En los últimos meses, pero con mucha más insistencia en las últimas semanas, los medios de comunicación nos han mostrado imágenes de la violencia que se vive en Siria, y nos cuentan los decesos diarios que no bajan de decenas.

Este país del oriente medio africano, cuenta con una población de 19 millones de habitantes, la mayoría de los cuales habla árabe. Comparte frontera con Turquía por el norte, con Iraq por el este, con Israel y Jordania por el sur. Es miembro de la Liga Árabe y de la Organización de las Naciones Unidas desde 1945. Su constitución (la de 1973) define oficialmente a Siria como un estado socialista laico reconociendo al Islam como religión mayoritaria.

El actual conflicto armado que vive, ha estado afectando gravemente al país y ha venido escalado en violencia, promovida esta, principalmente, por grupos terroristas que tratan de desestabilizar al gobierno del presidente Bashar Al Assad. Este conflicto armado se ha querido utilizar por parte de las potencias mundiales y aliados, para entrometerse en la política de Siria. A Estados Unidos, por ejemplo, se le ha acusado (Que raro, ¿no?) de querer aplicar en Siria el guión libio: sanciones internacionales, embargo aéreo, intervención militar occidental y cambio de gobierno.

En los órganos internacionales donde se ha discutido el caso de Siria se ha votado por una intervención (invasión), promovida por las grandes potencias, con la única finalidad de derrocar al Presidente. Por ejemplo, el pasado mes de Febrero se votó en la asamblea general de la ONU. De los países que participaron en el evento, 137 votaron a favor de la resolución; 12 se opusieron y 17 estados se abstuvieron. Entre los que se opusieron fueron Rusia, China, Irán y los países latinoamericanos del ALBA (Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América, integrada entre otros por Venezuela, Cuba, Bolivia y Nicaragua), que han manifestado su apoyo al régimen de Bashar al Assad.


En total, 27 estados son los coautores de dicho proyecto intervencionista, incluidos Qatar, Arabia Saudí, Bahréin, Francia, Jordania, Libia, Túnez, Turquía, Gran Bretaña y EE. UU.

Pero las denuncias no se han hecho esperar. Rusia, con su firme postura por impedir la intervención de países de occidente en el conflicto sirio ha sido respaldada por China, buscando siempre preservar la independencia, unidad y soberanía de Siria. Los otros países que también están en contra de la intervención son Irán, Venezuela, Cuba, Bolivia y Nicaragua.

Las negociaciones se han ido desarrollando satisfactoriamente y se han logrado importantes avances, como la entrada de Kofi Annan para la búsqueda de la solución pacifica de lo conflicto. Otro importante paso hacia la paz interna que dio el país fue el recién referendo nacional mediante el cual el pueblo votante aprobó con 87,4% las modificaciones sustanciales a la Constitución. Estas permitirán dinamizar la vida política con una mayor cantidad de organizaciones y partidos.

Aunque muchos han advertido sobre las consecuencias que traería el hecho de arremeter contra Siria, países como Israel, EU y algunos países europeos siguen insistiendo en la intervención de Siria, a costa, claro, del derramamiento de sangre.

Ante tan descarada propuesta de intervención (invasión), la comunidad internacional no puede seguir inmóvil, porque así permitiría la repetición del capítulo libio. Pero, ¿Lo permitirá?, esperemos que no.


13 mar 2012

Calderón y su demagogia contra las mujeres


Por Ricardo Flores Ríoblanco

En días pasados se “celebró” el día internacional de la mujer, y en México, diferentes figuras públicas cumplieron con el protocolo de felicitación, pues era “su día”; Felipe Calderón las llamó “la mayor fuerza de transformación” en el país,  y dijo:  “Nuestra meta debe ser erradicar la violencia contra las mujeres, que sigue existiendo en México por desgracia, en particular la violencia intrafamiliar y la trata de personas, una verdadera esclavitud ante la cual sociedad y Gobierno debemos reaccionar con firmeza y con determinación”.

Mi pregunta es: ¿tal meta es alcanzable dentro de un sistema social  que promueve la violencia, la inequidad  y que permite también la degradación de la mujer?

La mujer actual está sujeta a estereotipos muy bien elaborados para determinarle su papel dentro de la sociedad; desde pequeñas se les enseña a ser “madres” de pequeños juguetes y  se les induce a aspirar por “el marido” y “la familia feliz” para alcanzar un estatus social decoroso.  La mercadotecnia utiliza a la mujer y su sensualidad para lograr proyectar su mercancía, logra vender la idea de que si utilizas tal producto, te podrás conseguir una modelo como la del anuncio, y aunque no sea culpa suya, sino del sistema que así las educa, las modelos tratan su cuerpo como si fuese una mercancía, por ello dejan que se les utilice de las maneras más degradantes e insultantes.   

No se diga de los casi infinitos prejuicios que a la mujer se le inculca en cuanto a su apariencia física se refiere, la necesidad de acumular cuanta crema o producto de vestir se necesite para que “luzca bella” y “joven”, los cambios estéticos utilizando “bisturí” e inyecciones, etc.

A México le urge, en efecto, acabar con la inequidad de género, pero no haciendo demagogia ni poniendo de ejemplos a mujeres que por sus características, representan a una clase social determinada, en este caso hablo de “La primera Dama” y de la ya oficial “Candidata Presidencial”.

¿A la mujer de clase pobre, la trabajadora, la madre soltera, la indígena, a ellas quien las representa y defiende? El machismo promovido después de los turbulentos años de la revolución de 1910, cercenó el respeto y admiración que se había ganado la mujer, la cual fue parte activa e importante en la gesta revolucionaria (recordemos a Las Adelitas), que colaboraron al lado de los hombres; así mismo, el machismo –pues a la nación le urgía recuperar la fuerza de producción perdida en los campos de batalla- colaboró a  la sumisión de la mujer ante el hombre, fue excluida como fuerza progresista y pasó a ser “el ama de casa”.

La mujer debe recobrar su papel en la lucha por una sociedad mejor; fue precisamente cumpliendo ese papel como ha ganado sus más importantes batallas, de hecho, gracias a su lucha organizada fue creado lo que en un principió fue llamado el Día Internacional de las Trabajadoras, ahora simplemente llamado “Día Internacional de la Mujer”. 



La mujeres mexicanas tienen mucho por que  luchar aún, pero primero deben exigir un cambio social, proporcional al de sus aspiraciones, es decir, una sociedad donde al ser humano no se le considere como mercancía, sino como lo que es, un ser que posee en sí, la mayor fuerza de transformación que habita este planeta,  su fuerza de trabajo, que es la única generadora de toda riqueza, la cual no es repartida equitativamente, pues sólo un puñado se adueña de la mayor parte, dejando en la miseria a la mayoría, que es donde la mujer ocupa un lugar importantísimo en número, pero que aun así, se le menosprecia y explota al igual (o peor aun), que a los hombres. Su lucha, creo yo, debe ser contra la esclavitud del sistema, que ha sabido seducir la característica sensibilidad femenina, y dormirla ante la aterradora realidad que nos rodea, la pobreza.          

Cuando no es como debería ser.


 Por Dédalo de la Fuente

El periodismo se puede definir como la actividad profesional encargada de difundir información a través de los medios masivos de comunicación. En consecuencia, el periodista tiene ciertos derechos de informar a la sociedad pero también tiene obligaciones con la misma. Hablo de la ética periodística.

De acuerdo con los grandes redactores, en este sentido por “Ética periodística” podemos entender el pensamiento y la manera de actuar, dentro de la moral, de adhesión a la verdad, a la equidad y al respeto por la dignidad humana en la sociedad. En los medios de comunicación (pero ante todo, en los defensores de la verdad) debe existir honestidad al tratar cualquier tema por mínima o mucha importancia que este contenga, debido a que son ellos los que trasmiten valores, pensamientos, creencias u opiniones  a toda la sociedad en su conjunto.

 
En este sentido, llama la atención el periodismo de nuestro país. Si partimos del echo de que un periodista tiene que apegarse a todas las reglas que rigen su profesión, podemos declarar a ciencia cierta que en México, son muy pocos los periodistas que defienden  la verdad.

Basta un solo ejemplo: Denise Maerker Salmón en su programa de noticas “Punto de partida, dio a conocer dos reportajes relacionados con la organización social Antorcha Campesina y el municipio de Texcoco (No es mi intención defender a dicha organización pues sé que tienen muy buenos escritores y periodistas que seguramente ya se encargaron de ello). El punto de partida es la falta de honestidad con que la conductora y los reporteros tratan el tema. Los datos que mencionan en más de una ocasión son inverosímiles por falta de pruebas, ejemplo: se les califica de invasores pero los reporteros no demuestran porque son invasores, solo utilizan la palabra invasores porque quedaba bien en el reportaje (¿?).

¿Punto de partida?

A mi parecer, a muchos mercenarios de la información se les olvido o no saben que la tarea más apremiante del periodista es la de dar una información verídica y auténtica por la adhesión honesta a la realidad objetiva, dejando de lado la imaginación y los dédalos de conjeturas. Por lo tanto el periodista  se debe fundamentalmente al pueblo y es el pueblo quien tiene  derecho a recibir información verídica, oportuna e integral a través de los medios de comunicación.

Como en mi país las cosas andan mal, debemos tomar en cuenta que el contenido de los mensajes que a diario nos llegan se encuentra al servicio de quienes poseen el poder político y económico. De esta forma, la versión del mundo que los medios de comunicación nos muestren, será a fin de colaborar en subordinación con los dueños del capital y los medios de producción. Es posible ver en los mensajes mediáticos que ha diario nos trasmiten, una interpretación irreal del mundo y siempre maquillada, debido a que esto les sirve como instrumento de manipulación, y al sostenimiento de una sociedad en decadencia.


Dichoso


 Dédalo de la Fuente

Dichoso el viento que puede tocarte
dichoso el sol que puede mirarte
pero aunque ellos tienen la dicha de sentirte y mirarte
no tienen la dicha de poder amarte. 

Usted


Dédalo de la Fuente


Aquella flor tenía el mismo semblante que usted
  bella
            dulce
                y tierna
al verla por vez primera
logró quedarse en mis pensamientos
     no la flor 
               si no usted.


6 mar 2012

Aniversario de un Maestro: Oswaldo Guayasamín


Liseo González

“He pintado como si gritara desesperadamente,
y mi grito se ha sumado a todos los gritos que
expresan la humillación, la angustia del tiempo
que nos ha tocado vivir”

Oswaldo Guayasamín, nació en Quito, capital del Ecuador, el 6 de Julio de 1919. Fue el mayor de diez hermanos, de padre indígena de ascendencia quichua y madre mestiza. Durante su difícil infancia le tocó sufrir los prejuicios de tener un apellido de origen indígena.

Guayasamín, de ascendencia humilde, despertó desde muy temprana edad su aptitud por la pintura; su inquietud se despertó haciendo caricaturas de los maestros y compañeros de escuela. Posteriormente, y luchando contra el escepticismo de su padre, se gradúa de Pintor y Escultor en la Escuela de Bellas Artes de Quito. Realizó su primera exposición a sus escasos 23 años, en 1942. En 1943, después de recorrer durante un año los principales museos de Estados Unidos, viajó a México, donde conoció a José Clemente Orozco, del que fue alumno y a Pablo Neruda, con quien entabló una profunda amistad. Obtuvo en su juventud todos los Premios Nacionales y fue acreedor, en 1952, a los 33 años, del gran premio de la Bienal de España y más tarde del Gran Premio de la Bienal de Sao Paulo. Fue declarado el pintor iberoamericano por una cumbre de Jefes de Estado en La Habana, Cuba.

Su estilo realista, es uno de los más importantes estilos en el mundo del arte. Guayasamin era un gran humanista, un hombre humilde que entendía el alcance de un pintor y sabía proyectarse. Usó sus pinturas no solamente para abogar por los derechos humanos sino también para humanizar a nuestra sociedad representando ese dolor, esa rabia, esa angustia y esa reflexión de los más humildes. Transformó los colores y los lienzos en una epopeya, es decir, el hombre Latinoamericano. Nunca fue una persona de esconder su afiliación política, de la que estaba orgulloso.

Antes de adentrase en sus obras, tengo el deber de hacer la misma recomendación que algún día hiciera Pablo Neruda: “Pensemos antes de entrar en su pintura porque no nos será fácil volver.” Así es, no nos será fácil.

Sus obras se pueden ubicar en tres etapas:

“Huaycañan” (palabra quichua, que traducida significa “Camino del Llanto”), pintada de 1946 a 1952, está compuesta por 103 cuadros y un mural, es una visión de las etnias que componen el mestizaje americano: los indios y los negros, con sus culturas y sus expresiones de alegrías, tristezas, identidad, tradiciones y religión sobre todo de los países andinos, Perú, Bolivia y Ecuador.

 

“Vengo pintando desde hace tres o cinco mil años, más o menos. Y mi pintura es de dos mundos. De piel para adentro es un grito contra el racismo y la pobreza; de piel para fuera es la síntesis del tiempo que me ha tocado vivir.”


 “El Mestizo”


“La edad de la ira” entre 1961 y 1990, compuesta por 150 cuadros de gran formato, dentro de esa serie hay colecciones en torno a una misma temática: la denuncia de la violencia del hombre contra el hombre en este siglo. En ella se encuentran “Las manos” (12 óleos), “La espera” (11 óleos), “Mujeres llorando” (7 óleos), “Los Mutilados” (6 óleos), “Ríos de Sangre” (3 óleos) y “Reunión en el Pentágono” (5 óleos).

“Las Manos”

“Mi pintura sirve para herir, para arañar y golpear en el corazón de la gente. Para mostrar lo que el hombre hace en contra del hombre.”

                           “Ríos de Sangre I”                                            “Ríos de Sangre II”

                                                     “Ríos de Sangre III”

 “Reunión en el Pentágono”

“La Espera”
 “Si no tenemos la fuerza de estrechar nuestras manos con las manos de todos, si no tenemos la ternura de tomar en nuestros brazos a los niños del mundo, si no tenemos la voluntad de limpiar la tierra de todos los ejércitos; este pequeño planeta será un cuerpo seco y oscuro.”


 
”Hispanoamérica” 1982. Mural en el aeropuerto de Barajas, España.









“La Edad de la ternura” (“Mientras vivo siempre te recuerdo”), está es la tercera colección con más de 100 obras, que pintó desde 1988 hasta 1999, es un homenaje de amor a su madre, a las madres, como símbolo de defensa de la vida.


          


“La Madre y el Hijo”

Guayasamín nos dejó como legado su obra humanista, considerada como expresionista que refleja el dolor y la miseria que soporta la mayor parte de la humanidad y denuncia la violencia que le ha tocado vivir al ser humano de este siglo XX marcado por las guerras mundiales y civiles, los campos de concentración, los genocidios, las dictaduras y las torturas, es una obra que deslumbra y estremece. 

También dibujó a muchas personalidades, entre ellos Fidel y Raúl Castro, Francois y Danielle Mitterrand, Gabriel García Márquez, Rigoberta Menchú, Atahualpa Yupanqui, entre otros.

Guayasamín falleció a los 79 años de un paro cardiaco en Baltimore, Estados Unidos, el 10 de marzo de 1999. Cumpliendo con su expresa voluntad, los restos de Guayasamín reposan en una olla de barro resguardados por el árbol que él mismo sembró, llamado el Árbol de la Vida, que se encuentra en La Capilla del Hombre.

El Maestro Guayasamín dijo: “Mantengan encendida una luz que siempre voy a volver”, a lo que le podemos responder, ¡Maestro, usted nunca se fue, sigue aquí con nosotros! Y hoy en su décimo tercer aniversario, lo recordamos.

Anhelo

K.V.


Su alma se secó, poco a poco,
como la gota que se derrama
en el resplandor de la sombra;
sus esperanzas presas nadie tocó,
y su vida muerta proclama
la libertad de su alma que ama.

Llegó la hora


Dédalo de la Fuente


La muchedumbre se amotinaba
en una noche de abril
preocupada por las muertes
diarias que hay en mi país.

Veían morir a sus hijos
a causa de una lucha injusta sin cuartel
que el Gobierno ultraderechista
utilizó para sostener el poder.

Oh
por qué ya no siembran los campesinos
en sus tierras el alimento cotidiano
y en lugar de ello  siembran
amarguras y llanto.

Por qué el obrero que
trabaja con esmero
muere sin consuelo.

Por qué los pobres
del campo y la ciudad
no entienden que tenemos que luchar.

De pronto una voz  fulminante
de un hombre entre la masa
se alzó con gran estruendo
y dijo firmemente

No más pobreza
no más miseria
para esta patria mía.

Vamos proletarios
del campo y la ciudad
si alguien tiene que morir
que muera por  libertad
trabajo y pan.

Desterremos a los falsos redentores
y tomemos las riendas del porvenir
que el futuro de nuestros sucesores
tiene que ser feliz.

Eduquemos al pueblo
organicemos a los mejores
porque ha llegado la hora
de luchar por la emancipación
de los pobres.

Pongamos nuestro grano
luchemos con tesón
para que vivamos en un México mejor.

Dejemos el individualismo
y nuestro actuar pequeño burgués
que la hora ha llegado
para que luchemos
por un país menos cruel.

Luchemos ahora
porque así lo exige
la necesidad
por un mejor país
para los desheredados
del campo y la ciudad.

Eco

Quijano de la Rosa


Dadme el silencio, el agua, la esperanza;
dadme la lucha, el hierro, los volcanes;
acudid a mis venas y a mi boca como iguales,
y hablad por todos los pueblos, por mi sangre en lontananza…




Hecho inadvertido: la prepotencia presidencial


Ricardo Flores Ríoblanco

¿Cuántas veces hemos tenido la oportunidad de reclamar a nuestros gobernantes, nuestras inconformidades? Al pueblo pobre y trabajador  le esta vetado el alzar la voz, se le cierra la boca y cuando grita tratando de llamar la atención, se le tacha de alborotador y mal educado por los más “entendidos”, que el sistema promueve como “defensores de la libertad de expresión”.

Al pueblo le hacen falta espacios en donde se escuche su voz, pero le hacen  más falta gobernantes que lo escuchen y atiendan, que sean sensibles ante el sufrimiento de los que crean con sus manos callosas la riqueza nacional y que hacen patria con su sudor. Recientemente, al Presidente Calderón le fue interrumpido un discurso ante empresarios; el “vociferante” como lo llamó Calderón, fue Tonatiuh Moreno Ramos, estudiante de la Maestría en Comunicación de la Ciencia y la Cultura del Iteso.

Visiblemente ofendido por la interrupción, el Jefe del Estado Mexicano, le dijo que no había necesidad de vociferar, pues él dirigía un estado donde la libertad de expresión estaba permitida, y donde el dialogo era la principal forma de gobernar; Calderón, después de afirmar que había espacios disponibles para que el dialogo entre autoridades y ciudadanos se diera, pidió que antes de hacer cualquier tipo de reclamo, se racionalizara, que hubiera argumentos de por medio y no solo “gritos”, además de pedir, que le dejasen seguir conduciendo el país a su manera, pues era la más acertada y que ni él, ni su gobierno, estaban “cruzados de brazos”.

 A pesar de haber causado un disgusto al presidente, del hecho no se habló casi en los medios de comunicación, pasó casi inadvertido, así mismo la actitud prepotente del Presidente, que abusando del estrado, arremetió contra el inconforme llamándolo “manejado” e “ingenuo”, que dijo, se le llamaba de otra manera en su tierra, pero que estaba en “público”(sic!), ridículo intento de cachetada con guante blanco, insulto contra cualquier intento de crítica proveniente de la sociedad. 

Dejo por último, el párrafo final de  la carta que escribió Tonatiuh Moreno Ramos, esperando que urja a los tres lectores de Voz Activa a defender la verdad: “Muchos mexicanos estamos hartos del lenguaje de las balas y la sangre, y preferimos el de las palabras, aunque a veces tengan que gritarse. ¿Qué logré? Quizá materializar la voz de muchos que queremos que las cosas cambien. No sabía si el incidente terminaría con el silencio y mi detención o habría otras repercusiones. Creo que por lo menos logré que se reavive el debate, volver a darme cuenta de que somos muchos los que no estamos conformes y que podemos alzar la voz. El mundo ha cambiado y podemos cambiarlo. Iniciativas como la del Túmin o espacios como Nuestra Aparente Rendición dan esperanza y cada vez hay más indicios. Cada vez somos más los que creemos que otro mundo es posible.”